Palacio Carrascalino

Palacio Carrascalino se remonta a 1908. Es de estilo modernista y fue construido según el diseño del arquitecto Don Joaquín de Vargas y Aguirre, conocido arquitecto de Salamanca, entre sus obras destaca la Casa Lis, situada en el casco histórico de la cuidad. Por el Palacio han pasado numerosas personalidades de la época, Miguel de Unamuno (amigo personal del propietario), los diestros Manolete y Belmonte, entre otros toreros destacados de la época, ya que la finca contaba con una importante ganadería de lidia. También, detrás del Palacio, está la antigua plaza de tientas que se puede visitar. 

Asimismo, S.M. el Rey D. Alfonso XIII, pernoctaba ocasionalmente en su paso hacia Portugal. Una vez finalizado este período de esplendor y tras el fallecimiento del antiguo propietario, el palacio sufrió una serie de vicisitudes durante la guerra civil que le llevaron a un estado de abandono, hasta que en el año 2004 comenzó su restauración por el actual propietario y su apertura en 2009-2010, para que todos podamos disfrutar de él y formar parte de su historia.

Es el lugar ideal para la celebración de bodas y eventos especiales, ya tiene capacidad para un máximo de 400 personas. Dispone de 20 habitaciones en las que es posible alojar a 50 invitados con desayuno incluido. Cuenta con accesos, habitaciones y baños para discapacitados. A pesar de no tener capilla, sus instalaciones y jardines son aptos para la ceremonia de bodas civiles con maravillosas vistas.

Ofrece un menú de restauración  que incluye el alquiler de la finca, puesto de jamón con cortador, corners del cocktail, mantelería/menaje, adornos florales, cocktail completo con bebida, banquete completo con bebida, 4 horas de barra libre y recena. Elaboran todo tipo de comidas, incluyendo la tarta de boda,  adaptándose a las características especiales de los comensales: vegetarianos, veganos, diabéticos, hipertensos, celíacos.

Respeta los gustos  y deseos de los novios, por lo que les otorga la libertad de elegir a los proveedores de su preferencia, permitiéndoles alquilar únicamente el espacio y poniendo a su disposición dos cocinas propias para que el catering contratado realice todas sus preparaciones. Si bien es cierto, la finca en todo momento asesora y acompaña a los novios en la elección de los proveedores y asimismo, recomienda como catering "A Fuego Lento" ya que, aparte de prestar el servicio de catering, también ofrece servicios de decoración, papelería, música en directo, etc.

Entre sus servicios añadidos, se encuentran actividades recreativas como visitas culturales por la zona, restaurantes de degustación, paseos por el campo y la posibilidad de asistir a un campo de golf situado a 10 minutos en coche.

Debido a que realizan un solo evento por día, se recomienda reservar con anticipación para garantizar la disponibilidad para su ocasión especial. 

Palacio Carrascalino le ofrece asesoramiento profesional completamente personalizado, para hacer de su celebración un día inolvidable.